1. Una Yeguada de confianza real
   1. La primera referencia histórica surge en el 1710, específicamente en el manual “Doctrina del Cavallo, y arte de enfrenar dedicado al Serenísimo Sr. Don Juan, Príncipe de Portugal del Brasil” donde ya se dejaba constancia de la presencia de ejemplares pertenecientes a esta yeguada en las caballerizas de dicha
2. Esfuerzo, tradición, tiempo y prestigio
   1. Y es que esta yeguada ha proveído históricamente de ejemplares a la corte portuguesa siendo habituales entre los caballos de silla de los reyes de este país. A la llegada de la república de Portugal en 1920, dos de nuestros potros se convierten en sementales del Estado. Es tal en estos momentos el prestigio de la yeguada, que también el gobierno Español adquirió algunos de nuestros ejemplares en 1914 y 1923
3. Dedicación y fortaleza
   1. Aunque hasta 1914, la yeguada constaba de 100 madres, debido a la generalización de la trilla a vapor el sector se encuentra en decadencia. Es por ello que se decide por parte de la familia disminuir el número de yeguas hasta llegar a las 40 madres, por supuesto 100% R.E.
4. Reconocida en todo el mundo, madre de las nuevas ganaderías
   1. La yeguada de la escalera no solo vendía sus sementales por el territorio español, sino que a su vez exportaban fuera de España. Entre sus principales clientes encontramos:
      1. Escuela de Viena
      2. Sementales del ejército

• Cuerpo de Policía de Barcelona

1. La Remonta
2. La yeguada militar

5. Herencia, pasión y continuidad
   1. En 1973 la yeguada se divide en dos, siendo Don José Luis de la escalera quién continuó con el hierro familiar en la finca pozo santo, llegando a posicionar esta ganadería como una de las yeguadas más reconocidas en todos los tipos de doma por sus inigualables movimientos, la belleza del animal y su indudable Es en esta época cuando la ganadería es

impulsada gracias a la multitud de reconocimientos que recibe en todos los campeonatos a los que se presenta, llegando a ser catalogada como la mejor yeguada en varios años.

Sin lugar a dudas, escalera es esfuerzo, es tradición, es prestigio, es tiempo y es saber que pasa de generación en generación. Una yeguada que con mucha historia sobre sus espaldas continúa perfeccionando el linaje y raza del pura sangre español.